SECRETARIO SINCEROTE

Noviembre 19, 2018

El problema de fondo del tercer titular de la Secretaria de Salud y Bienestar del Gobierno del Estado en los tres años transcurridos de la gestión der José Ignacio Peralta, Miguel Becerra Hernández, es que llegó a esa compleja Dependencia pensando que era como la muy estructurada, sistematizada, rígida, Delegación Colima del Instituto Mexicano del Seguro Social donde todo está programado para que funcione en automático, muy pocas son las oportunidades de emplear el criterio, el mejor sentido y el oficio político. Allí rifa el librito, caso contrario de la SS y BS a donde, para colmo, llegó con una media docena de amigos que no pelan un chango a nalgadas, a pesar de lo cual les asignó posiciones clave en el organigrama.
Becerra Hernández no ha dado pie con bola en la SS y BS porque se conduce, decide y trata de imponer su ley, como si todavía estuviera en el IMSS donde se jubiló. Además, su estilo personal de liderazgo es completamente disfuncional, dañino al clima laboral a más no poder, pues intriga, descalifica a unos colaboradores con otros enfrentándolos entre ellos; le encanta que le lleven y le traigan quedándose con el vuelto. Lengua suelta, baladronea con ofrecerles plata o darles plomo a los periodistas que critican sus fallas, excesos y abusos, como irresponsable de los servicios de salud para la población con cargo al erario público.
Los trabajadores de la salud se saben solos y sus almas, sin líder ni respaldo alguno de quien debiera velar por su seguridad laboral, herramientas y materiales de trabajo e integridad física. Ejemplo claro de su desinterés y falta de solidaridad con ellos fue su pasividad mostrada ante la agresión que personal médico del Hospital Regional Universitario recibió hace unas semanas del muy violento “fifí” Eduardo Audrey Palomino Castro sin que el cincerote MBH se diera por enterado. ¡Y hasta la flecha¡

Su reciente comparecencia ante el Congreso del Estado el jueves anterior evidenció sus carencias y limitaciones, pero también su sinceridad forzada porque no podía tapar con verbo las perniciosas deficiencias de los hospitales, centros de salud y programas de prevención sanitaria a su caro. Ahora sí que le tupieron duro y tupido, como a Bucho,y no tubo de otra que aceptar, compungido y enredado, que el Hospital Regional Universitario, por ejemplo, carece de tomógrafo, servicio de laboratorio, abasto oportuno de medicamentos y material de curación. También, que tiene en el abandono a la población rural del estado, incumple con los pagos al personal regularizado, comanda una fuerza aérea, tiene cuates de asesores y solapa prácticas de corrupción, etc., etc., y etc.
Ante los señalamientos que los diputados le hicieron al ginecólogo Becerra Hernández, éste empezó a parir chayotes al grado de reconocer la escasez de medicamentos, falta de médicos en los centros de salud de las ciudades y las comunidades ruarles, carencia de equipamiento moderno para atender las enfermedades más sentidas por la población, presupuesto insuficiente para los requerimientos básicos de salud, médicos en centros de trabajo de alto riesgo por la violencia imperante en la entidad abandonados a su suerte, y excesiva subrogación de servicios hacia otras instituciones públicas y/o privadas. Ya entrado en gastos, al más puro estilo del preciso AMLO, hasta para para el Seguro Popular tuvo calificándolo de “ni seguro, ni popular”.
Los funcionarios del sincerote Secretario no entienden cómo es que éste tiene un asesor sin sueldo ni nombramiento que dirige y preside reuniones, y dispone de recursos públicos en flagrante usurpación de funciones. Ante las puntuales observaciones que le hizo en tribuna el diputado panista Fernando Antero Valle de irregularices cometidas por la SS y BS con empresas farmacéuticas, Miguel Becerra Hernández se fue por la vía fácil de inculpar a Agustín Lara Esqueda, quien al frente de esas hizo estragos en el gobierno de Mario Engaños.

EL ACABO
 Los días del ginecólogo jubilado al frente de la SS y BS están contados. Ojalá que el o la que venga en nombre del Señor (gobernador) a reemplazarlo acredite mayor capacidad en todos los rubros; y que le den una buena fumigada a la Dependencia para erradicar a los perniciosos traficantes de negocios a costa de la salud de los colimenses. Nada más pero tampoco nada menos, José Ignacio Peralta.

JOSÉ LUIS SANTANA OCHOA